A pesar de la excesiva altura del río, la pesca variada está en un buen momento. Grandes amarillos y moncholos, patíes generalmente chicos, y al atardecer rayas de todos los tamaños nos permiten pasar una entretenida jornada. Además, los riachos están plagados de doradillos juveniles que no superan los 25 cm., pero a pesar de ello es muy divertido pescarlos con artificiales y equipos ultralivianos.
Video de la captura de un amarillo mediano. Usamos como carnada tripa de pollo pescando con plomada pasante pesada para poder llegar al fondo de los pozones. Para destacar la claridad y transparencia del agua.
En esta filmación vemos otro amarillo más grande que el anterior, pescando a fondo y con tiritas de mojarra -la carnada que mejor está andando por el momento-.
