El río está atravesando un descenso rápido de su caudal, lo que hace que se enturbie muchísmo el agua y que el "pescado" esté permanentemente en movimiento buscando nuevos lugares. Esto transforma a la pesca en un desafío más difícil del que estábamos acostumbrados, pero con paciencia y buscando podemos obtener grandes resultados. La carnada volvió a ser una de las variantes más efectivas, aunque haciendo bait o spinning podemos obtener grandes tarariras y doradillos. También es una gran alternativa la pesca nocturna, algo que nos viene dando muchas satisfacciones últimamente y además nos ayuda a protegernos del duro calor del verano. Como pueden ver, Rosario sigue siendo una de las grandes opciones para elegir al momento de pescar... los esperamos.
domingo, 29 de enero de 2012
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