jueves, 13 de mayo de 2010

Un día de muchos dorados... y algo más

El miércoles la jornada comenzó con un poco de pesca a la espera y unas manduvas y moncholos como resultado. A medida que fue calentando el sol los dorados se fueron activando hasta darnos un espectáculo que hacía mucho tiempo que personalmente no veía: un gran cardumen de todos los tamaños cazando, amontonándose unos con otros, mojarras saltando y borbollones por doquier. Lo increíble fue que este hermoso show duró más de dos horas y con nosotros al lado. Al principio hablábamos despacio y nos cuidábamos de no hacer ruido pero nos dimos cuenta que no había nada que los aplaque un poco... algo que este hermoso pez y la naturaleza nos regaló para que disfrutemos a pleno.
En las fotos están Steven y su hijo Stéfano, partícipes de una excelente jornada gracias a un pez tan noble, combativo y único, el DORADO.

No hay comentarios: